martes, 17 de abril de 2012

~... No había miedo

Deslizó el dedo índice por su espalda desnuda, ella descansaba aún profundamente. Con la respiración entrecortada y agitada. Él tenía la mente en blanco, rememoraba el momento de gloria que había sentido hace apenas unos minutos.

La nívea sábana cubría a duras penas ambos cuerpos y la brisa entraba por la ventana de la habitación. Observó su cabello negro, como el mismo carbón cayendo por su costado. Besó su hombro.
Ella se dio la vuelta, sonrió como si ambos fueran partícipes de un juego secreto; un juego que solo ellos dos conocían.

Le tenía obsesionado, durante todo el tiempo que había pasado en aquel lugar, ella había estado poniéndole a prueba y al final había caído en su red, quizás ambos habían caído de manera reciproca en la del otro.
Su juego era peligroso, podían llegar a quemarse si se lo proponían, no había miedo.

viernes, 13 de abril de 2012

Estar confundido es algo completamente normal, no saber que hacer ni como plantearte el mundo que se te presenta. Quizás deberíamos optar por cosas más sencillas, digo yo.